miércoles, 26 de octubre de 2011

The Sketchbook Project

Por medio de Twitter llegué a esta iniciativa novedosa para quienes siempre andan mamarracheando algún anotador, cuaderno o Moleskine -si sos muy hipster y afortunado-.
Es sencillo. The Sketchbook Project crea un espacio para compartir la creatividad de todos. Anotándose en el sitio (y pagando una tarifa por participar), recibís un cuadernito en el que sos libre de hacer arte en la forma que te parezca. Una vez finalizado el proceso creativo, lo mandás a The Brooklyn Art Library, en New York, Estados Unidos y ellos se encargan de que estos miles de sketchbooks de todo el mundo que recibieron sean exhibidos en galerías y museos de los países más importantes. Es como el tour de una banda de rock, pero con cuadernos en lugar de rockstars.
Cuando termina el tour, los cuadernos entran en la colección permanente de The Brooklyn Art Library.
Cualquiera, en cualquier parte del globo, puede participar de este proyecto. Basta con entrar al sitio, elegir un tema sobre el cual vas a pintarrajear, completar tus datos, esperar el cuadernito y voilá.

2011 Sketchbook Project Tour Seattle from mightymoss on Vimeo.

viernes, 16 de septiembre de 2011

The Decemberists


Muy pocas veces escribo sobre música porque digamos que no sé nada y soy muy imparcial. Algo me gusta mucho -y lo amo con locura- o no me gusta nada -y lo ignoro-. Me limito a redactar crónicas bastante chotas de recitales a los que voy, que siempre quedan en las sombras de mi disco rígido. La objetividad, por supuesto, is out of the question.
Pero cuando descubro bandas bonitas siento la necesidad de expresárselo al mundo. Y para eso está el blog.
En esta oportunidad, debo decirles, estimados lectores invisibles, que no se deben ir de este mundo sin escuchar The Decemberists, una banda de indie folk de Oregon, Estados Unidos. Están desde el 2001 dando vueltas por el éter musical pero recientemente descubrí su último disco The King is Dead y no tiene desperdicio.
El folk estadounidense puede resultar monótono pero estos decembrinos tienen el toque indie justo que, en mi caso, es necesario para gustar. Acordeón, organito, voces certeras y el ritmo que te hace mover la patita.
Además, tienen una estética maravillosa. Si no, mirate los posters con que anuncian sus shows:


Me enamoraron. Como la música, que nos engatuza a todos, todos los días.
(Rolling Stone, in your face!)

jueves, 4 de agosto de 2011

Move

Las ganas de viajar...

MOVE from Rick Mereki on Vimeo.

miércoles, 27 de julio de 2011

No me ama

Me fascinan los cortos. No sé por qué. Y éste, del actor argentino Martín Piroyansky (parte de esta ya no tan reciente legión de jóvenes actores cool, medio hipsters) me pareció muy lindo.

NO ME AMA (SHE DOESN'T LOVE ME) from santiago capulos on Vimeo.

sábado, 25 de junio de 2011

Alpargatas cool, efecto solidario

Frecuento mucho (demasiado) Tumblr. Para quienes no lo conocen, es una plataforma en la que se pueden compartir fotos, videos y textos. Los tumblers que sigo por lo general suben fotos, por cual para mí esta especie de red social es como la evolución del fotolog que supimos conocer, sólo que en su versión norteamericanizada. Como nena que soy, sigo muchos de moda y desde hace un tiempo a esta parte noté que diferentes usuarios (yanquis, of course) comparten fotos de nuestras queridas y comodísimas alpargatas como la siguiente:


Me resultó curioso no sólo que un calzado así de tradicional haya llegado tan masivamente a la sociedad consumista norteamericana sino que, además, la etiqueta tuviese nuestra bandera. Por suerte está Google para sacarnos todas nuestras dudas: resulta que TOMS es algo así como un movimiento solidario.
En 2006, un norteamericano viajero, Blake Mycoskie, vino a Argentina y (no me consta cómo) entabló amistad con chicos de nuestro país, descubriendo que no tenían calzado para proteger sus pies. Decidido a ayudar, creó TOMS, una compañía que por cada par de calzado que se compra le da un par nuevo a un chico necesitado. Su iniciativa se amplió y ahora también con TOMS Eyewear, por cada par de lentes que se adquiere, la empresa le da asistencia oftalmológica a quien lo necesite en países en vías de desarrollo.
La cuestión es que ahora TOMS hace alpargatas y gafas cool y la juventud estadounidense parece haber comprado esta iniciativa con gusto. Es paradójico que un movimiento que tiene sus raíces en las diferentes situaciones de necesidad haya impuesto una moda, ¿no? Bienvenido sea.

miércoles, 8 de junio de 2011

7 de junio: Día del Periodista

"I got this idea of doing a really serious big work. It would be precisely like a novel, with a single difference: every word of it would be true from beginning to end".-
Truman Capote

sábado, 21 de mayo de 2011

Instantánea de Jack Johnson

El recital de Jack Johnson, en el marco del Quilmes Rock, cumplió a rajatabla con todas las peculiares características que se repiten cada vez que nos une en multitud un músico o banda.

Aún después de que la marca de cerveza parodiara en sus publicidades las ridiculeces que hacemos cuando vamos a algún show, la gente parece mantener las costumbres.

La más común fue la de las coordenadas absurdas por teléfono para que el amigo que llegó tarde ubique al grupete. A la torre de sonido -que es la única referencia fija- se le otorgaron variados nombres: “mangrullo”, “andamio”, “coso”, “donde están los camarógrafos” e infinitos etcéteras. Ya se sabe que las chances de ubicar a alguien son 2 en 40 millones, sin embargo, se sigue apelando al inútil “estoy levantando el celular”.

Por otro lado, estuvieron esas personas que creen más importante captar con la camarita y/o celular lo que ocurre en el escenario que, de hecho, estar apreciando el show. Se les cansa el brazo, pero lo mantienen alzado hasta las últimas consecuencias, chequeando de tanto en tanto a través de la pantallita que esté todo en orden. Ahora bien, no importa haber pagado un dineral por estar ahí, sólo es importante que salga bien el videíto con sonido saturado que va a terminar subido a YouTube junto con miles de videos chotos más… Es más comprensible si se está a una distancia envidiable de la estrella, pero si estamos a varios metros, dudosamente el resultado de esa grabación valdrá la pena.

Los que no faltaron son los que por primera vez van a un recital “de parados” y se quejan de que no ven nada y también rezongan cuando alguno se ubica adelante. Jack Johnson convocó a un montón de estos novatos o parejas cuyo prontuario recitalero se limita al Luna Park. Digamos que su música amerita más un recital de esas características -más íntimas- que un festival rockero. A la fuerza, tuvieron que conocer la ley de la selva, que establece que si encontraste un hueco copado, te quedás hasta que la masa te lo permite. La gente va rotando y te tenés que almodar, codear o empujar; putear a cada uno no es una opción.

También dijo presente la minita sacada/calentona que se sabe todos los temas y los canta en un agudo importante que llega a tapar los decibeles del sonido. Es la misma que en la adolescencia fue a ver a los Backstreet Boys y no pudo deshacerse de los vicios. Es importante saber que están en todos los recitales y creen que cuanto más fuerte gritan, más le calientan la pava al que está arriba del escenario. También es inútil tratar de callarla.

Finalmente, ya no quedan dudas de que el público argentino es de los más aduladores. No importa qué haga el músico, de hecho Jack se equivocó de verso en alguna ocasión y arrancó con los acordes pifiados en otra, pero bastó que se disculpara diciendo que hace tiempo no se sube a un escenario para que todos lo aplaudieran como si fuera la última vez.





jueves, 5 de mayo de 2011

The New York Times, al cine

En moda le dicen "must have" (esa prenda y/o accesorio que no puede faltar en el guardarropa). En este caso, este próximo estreno sería un "must watch" para todos los que nos apasiona el periodismo.
Se viene el documental de The New York Times, "Page one: inside The New York Times", dirigido por Andrew Rossi, con fecha de estreno el 24 de junio en Estados Unidos. Esperemos que llegue, al menos, a algunas salas porteñas.

Vía: @fernandezpm

lunes, 21 de febrero de 2011

No te soltamos

Gustavo Cerati lleva 9 meses en estado de coma debido a un ACV que sufrió en Venezuela durante su gira. Lo repentino del accidente dejó a todos sus fans sin palabras. Pero mi amiga y colega Florencia Di Niro supo expresar lo que todos sentimos. Hoy, cuando su cuadro no parece dar buenas noticias le decimos "No te soltamos"...

Y te recostas en ese sueño entre la vida y la muerte solo porque no te querés despegar de este mundo, o tal vez porque nosotros te agarramos fuerte la mano para no dejarte ir.

Es mezquino querer retenerte pero es doloroso pensar en que te vas. Si te dejamos partir ahora si decidis parar la lucha, se va a sentir un vacio que sabe a dolor en el corazón. Por eso nos aferramos a vos, a la imagen viva y resplandeciente de lo que fuiste, y de lo que no sabemos si vas a volver a ser. Es justamente por eso que los que creen rezan y los que no hacen fuerza para ganarle al la lógica y el esceptismo, todos deseperados por creer que todavía es posible verte despierto. Intentamos vencer, en nuestro pensamiento, a esa muerte que pretende ganarnos en la pulseada o, mejor dicho, ganártela a vos.

Es raro personificar a la vida y la muerte, cuando hablamos de un duelo que venimos transitando hace 9 meses. Porque en mayo perdimos parte de lo eras, pero sabemos que todavía hay una chance más. Siempre esperamos escuchar esa noticia que nos devuelva la sonrisa, esa seguridad de saber que estás bien; que estás acá, en cuerpo y mente. Y hay días en que lo que nos informan hace crecer las esperanzas y otros en los que de un golpe la realidad nos prepara para lo inevitable.

Gustavo, somos todos: los que te conocemos desde la muchedumbre de un estadio, o la soledad de un cuarto lleno de música, o desde tus palabras escritas en un papel, o tu imagen pixelada en una pantalla, los pocos que te pudieron saludar, los que te robaron una sonrisa para la foto, esos colegas que te admiran, esos que también fueron amados por vos. Somos muchas manos que no te sueltan, muchos corazones heridos. Somos tantos que todavía creemos que un día te vamos a ver volver.

No nos sueltes más Gus, que todavía queda tanto por decir...